¿Tu llave deja de funcionar de repente? Quizá no necesitas de un profesional cerrajero para arreglar este problema, puedes tú mismo corregir el problema sin necesidad de solicitar el servicio de una cerrajería.
Te cuesta abrir la puerta, tu llave se atasca constantemente, es casi seguro que te haya pasado esto por lo menos una vez y te preguntaras ¿Qué debo hacer? ¿Llamar a un cerrajero? Bueno no, este no es un problema extrema necesidad.
¿Qué hacer?
Por ser un método bastante efectivo y fácil lo que más se recomienda para el mantenimiento de una cerradura es aplicarle polvo de grafito. Si luego de aplicarle el polvo de grafito la llave aún se sigue atascando, debes desmontar la cerradura para limpiarla cuidadosamente con alcohol.
¿El lubricante es una buena opción o no?
En muchas ocasiones expertos recomiendan usar lubricantes cuando las llaves se atascan en las cerraduras, en algunos casos esto tienen un efecto negativo pues puede crear incrustaciones haciendo que las cerraduras funcionen mucho peor.
Lo recomendable es evitar echarle lubricante a las cerraduras para evitar dañarlas, aunque en algunos casos pueda funcionar deberías evitar correr el riesgo.
¿Qué pasa si tu puerta es de madera?
Para el caso de las puertas de madera lo primero que debes considerar hacer es verificar el nivel de humedad de la puerta.
Existe un material de cedro que requiere mantenimiento, debes abrir los huecos y dejar pasar por lo menos 10 días para luego volver a limpiar o lubricar la cerradura.
Lo más seguro y recomendable en cualquier momento para cuidar las cerraduras es utilizar el grafito.
Si en algún momento ves la necesidad de suavizar el funcionamiento de la cerradura cunado insertas tu llave, debes echarle grafito.
Algunas personas recomiendan para el mantenimiento de las cerraduras, lubricar los pestillos.
Para este caso, lo que debes hacer es echarle unas gotas de aceite con mucho cuidado solo a ese lugar, sin que le caiga aceite a las zonas que lo rodean, de manera contraria podría comenzar a humedecerse y dañarse.
Consejos que harán que tu cerradura se mantenga en buen estado:
- No abrir la puerta de manera forzada o brusca
- Ser cuidadoso al momento de introducir la llave en la cerradura
- No dejes que los pequeños de la casa jueguen con las manillas de la puerta, eso las daña rápidamente
- No tirar las puertas.
- Hacerle limpieza a las puertas y cerraduras
- Limpia las cerraduras con un paño mojado con un poquito de agua.
- Utilizar llaves que no estén deterioradas.
- Al querer abrir o cerrar la puerta debes introducir la llave correctamente hasta el final.
- No debes dejar la llave en la cerradura por mucho tiempo, esto puede dañar el cilindro.
- En épocas de frío las cerraduras normalmente se endurecen y se atascan con facilidad, lo que debes hacer en estos casos es desmontar la cerradura y engrasar bien cada una de sus piezas.
Para que hagas esto de manera correcta y uniforme puedes ayudarte de un cepillo de dientes, recuerda hacer uniformemente de lo contrario el acumulado de grasa puede traer consecuencias.
Mucho cuidado con las piezas, cada una de ellas tiene una gran importancia, si olvidas colocar alguna en su lugar correcto o si doblas la pieza esto puede dar totalmente el funcionamiento de la cerradura.
En caso de optar por comprar una nueva cerradura y deseas instalarla por ti mismo, ten mucho cuidado, una mala instalación puede hacer que la cerradura no funcione bien.
Un último consejo que no podemos dejar de enfatizar, usa topes en la puerta, así evitas los golpes fuertes que estropean a cerradura.
¡Cuida tus cerraduras!